Un inversor que decide apostar por metales preciosos tiene varias opciones para elegir; entre ellas las dos más conocidas, que son el oro y la plata.
Escoger entre estos metales puede resultar una tarea complicada ya que, aunque hay muchos que piensan que el oro siempre ha sido más valioso, lo cierto es que la plata también puede resultar una gran opción e incluso mejor que el oro.
La plata tiene numerosos usos indispensables dentro de nuestra sociedad y, de hecho, no tiene sustituto conocido en muchos casos. También es más escasa que el oro, debido sobre todo a que no suele reciclarse, y esto podría resultar en un aumento considerable en su valor dentro de unos años, pudiendo hasta superar el valor del metal dorado.
Hace un tiempo, por ejemplo, fue un componente clave para la fabricación de la película utilizada en la mayoría de las cámaras. El auge en la popularidad de la fotografía digital ha hecho que ya no siga usándose de esta forma pero, sin embargo, ha seguido utilizándose en el desarrollo de los teléfonos móviles y otras tecnologías.
La plata tiene muchos usos industriales en la actualidad. Se usa en casi todos los aparatos eléctricos por su capacidad de conducción térmica y eléctrica, que la hacen idónea para ello, así como para la fabricación de semiconductores y paneles solares utilizados para centrales de energía fotovoltaica. Existe también una creciente tendencia a su utilización en medicina, debido sobre todo a sus propiedades antibacterianas.
La plata nos acompaña día a día en artículos de uso cotidiano, que contienen cantidades variables de plata. Teléfonos móviles, ordenadores, teclados, refrigeradores, lavadoras, joyería e incluso ropa; todos estos productos que tan a menudo utilizamos contienen plata.
Por este motivo, podemos imaginar lo que ocurrirá si en un futuro comienza a escasear, tal y como muchos prevén que pasará: su valor se disparará, y aquellos que apostaron por invertir en plata conseguirán enormes beneficios.
Tanto el oro como la plata son activos muy líquidos, vistos por todos desde siempre como un bien valioso. Desde luego, ambos son una buena opción para invertir en ellos. Pero al igual que puede decirse que el oro tiene más demanda en estos momentos, también es sabido que la plata tiene otras ventajas como su accesibilidad.
Y es que la mayoría puede permitirse invertir en plata, aunque sea en pequeñas cantidades, debido a su precio asequible. Por ello, también es una gran forma de comenzar para aquellos inversores principiantes que no quieren arriesgar demasiado pero también buscan dar un buen uso a sus bienes.
La demanda de la plata ha aumentado en los últimos años y, como hemos visto, hay motivos para ello. Muchos inversores empiezan a decantarse por la plata en lugar de por el oro, ya que es una gran opción para sacar el máximo beneficio a su dinero. Sea cual sea el tipo de plata por la que se invierte, ya sea de forma física o por medio de acciones, puede conseguirse un gran rendimiento.
FUENTE: TheGoldHouse